Que disfrutante fue ver a los once fantásticos entregar el alma los 90 minutos de juego.
Los pases del equipo peruano fueron rápidos aunque muchas veces no muy certeros. Mejor dicho, cuando pasaban no pasaban siempre a un compañero y a veces la bola se perdía o se la entregaban a un jugador paraguayo. No se si fue por los nervios, que no los deberían de tener, o será porque se veía que estaban dando el todo por la bicolor. Dando el todo por la bicolor no se veía desde hace muchos años y es muy refrescante de verlo ahora.
Se perdieron ocasiones de hacer gol, por no tener calma y esa calma es la que se necesita mucho para ganar.
Gracias a la experiencia de los jugadores peruanos la calma cada vez es controlada mejor.
Los dos goles de Guerrero fueron justos aunque se debería de haber ganado por mas goles.
De todos modos no nos podemos quejar de este equipo que al menos en este partido lo dieron todo y presionaron a los paraguayos los 90 minutos que duro el juego. El equipo paraguayo fue dominado por el equipo peruano casi todo el partido.
En el fútbol todo es mental y en esta oportunidad los once fantásticos salieron a ganar si o si. Esta mentalidad es de un equipo triunfador y bienvenida sea para apagar toda esa sed de triunfo que tiene todo Perú.
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